No hay empresa ni sector que no se enfrenten a una rápida transformación. Y no solo su propia transformación, sino que hay que hacer frente a enormes desafíos globales, como pueden ser el cambio climático o los cambios en el poder político y económico.
En definitiva, todo cambia a velocidad de vértigo y las empresas deben aprender a adaptarse en consecuencia.
Estas 8 tendencias que aparecen en el artículo ofrecen una imagen de que están haciendo las organizaciones para adaptarse al mundo.
Operaciones sostenibles y resistentes
Nos guste o no, todos debemos tratar de eliminar o reducir los costes medioambientales de nuestra actividad. La descarbonización de la cadena de suministro es un buen punto de partida, pero, hay que ir más allá y tratar de mejorar la sostenibilidad de todas las operaciones empresariales.
Y esta sostenibilidad debe estar vinculada a la resiliencia para ser capaces de adaptarse y sobrevivir a largo plazo. Cualquier empresa que ignore la sostenibilidad no tendrá éxito en esta época de consumo consciente.
Equilibrio entre las personas y la robotización
Indudablemente, cada vez tenemos más tecnología capaz de realizar tareas de manera eficaz que antes realizaban las personas. Ante esta situación, hay empresas que se plantean: ¿Dónde está el equilibrio? ¿Cómo repartir las funciones entre personas y máquinas?
Es un hecho que la automatización afectará a todos, por tanto, los directivos de las empresas deben preparar a sus organizaciones -y a sus empleados- para la cambiante naturaleza del trabajo.
Organizaciones más trasversales y ágiles
De toda la vida, las organizaciones han sido muy jerárquicas y rígidas en sus estructuras.
Pero esto está cambiando ya que se están dando cuenta que para responder a la demanda eficazmente, deben de ser capaces de reorganizar rápidamente los equipos y responder al cambio y esto solo se puede hacer con estructuras más trasversales y ágiles.
Autenticidad
Los consumidores actuales buscan marcas comprometidas con sus valores. Por ejemplo, La autenticidad ayuda a fomentar las conexiones humanas, porque, como humanos, nos gusta que las marcas y empresas muestren cualidades humanas importantes como la honestidad, la fiabilidad, la empatía, la compasión, la humildad y quizás incluso un poco de vulnerabilidad y miedo.
Queremos que se preocupen por los problemas y defiendan algo más que la obtención de beneficios.
Empresa con propósito
Esta tendencia está relacionada con la autenticidad y consiste en asegurarse de que su organización existe para servir a un propósito significativo, y no sólo para dar beneficios a los accionistas.
El propósito define por qué existe la organización, no lo confundamos con la misión y la visión.
Un propósito sólido debe tener la promesa de transformar o luchar por algo mejor, ya sea un mundo mejor, una mejor manera de hacer algo o lo que sea importante para su organización.
Cooperación e integración
El mundo empresarial global nunca ha estado tan integrado. Y es una buena noticia, porque la necesidad de trabajar juntos para resolver los principales retos empresariales es grande.
De hecho, en el futuro, será cada vez más difícil tener éxito sin una colaboración realmente estrecha con otras organizaciones a través de una mayor integración de la cadena de suministro, una mayor integración de datos o bien el intercambio de datos entre organizaciones.
Nuevas formas de financiación
La generación de financiación también ha cambiado. Han surgido nuevas maneras de conectar a las empresas con inversores como por ejemplo el crowdfunding, las ofertas iniciales de monedas (ICO), la tokenización y las sociedades de adquisición con fines especiales (SPAC).
Muchos de estos nuevos métodos están impulsados por el movimiento de las finanzas descentralizadas basada en el blockchain.
¿Y vosotros? ¿Preparados para el 2022?
